El problema de los plásticos ¿Qué puedo hacer yo?

Está claro que a nadie le gusta encontrarse un plástico mientras se da un baño en la playa o en cualquier otro entorno natural.Pero son muy pocos los que conocen el verdadero problema que provocan los plásticos que se abandonan en la naturaleza. Más allá de un acto incívico, puede causar la muerte en ciertos animales por ingesta, por daños físicos y enredos o por la acumulación y dispersión de sustancias tóxicas; además, puede alterar los ecosistemas.
Pero la cosa no termina ahí. El transcurso del tiempo junto con otros factores ambientales, como la exposición a las altas temperaturas o la radiación solar, hacen que estos plásticos se vayan degradando y se conviertan en trozos más pequeños, hasta convertirse en microplásticos.
Los microplásticos son partículas que a veces son visibles y otras no (las fibras de ropa, las pequeñas partículas de los productos de higiene.) que acaban en la tierra, en las aguas del interior como ríos, canales o pantanos y, finalmente, en el mar. Los animales y las plantas se nutren de lo que haya en la tierra y en las aguas y, por ende, pueden acabar en nuestro organismo.
Cambia tus costumbres en la compra:
– Lleva siempre una bolsa de tela para tus compras o reutiliza las bolsas de plástico que ya tienes.
– Compra alimentos a granel, opta por no comprar la fruta en bandejas, ni envuelta.
– Lleva al contenedor amarillo de los envases todos los envases que emplees (plásticos, latas, bricks.)
– Reduce el consumo de cosas de plástico
– Separa la basura, recicla y reutiliza