San Licer
Cada 26 de agosto la villa de Zuera celebra a su patrón San Licer, un obispo francés cuya devoción, según se cuenta, fue traída a esta localidad por caballeros gascones que venían a incorporarse a las tropas aragonesas que iban a combatir en las Navas de Tolosa. Se dice que portaban sus reliquias a lomos de una mula y que al llegar a la iglesia de Zuera las campanas comenzaron a repicar por sí solas de manera milagrosa a la vez que el animal se negaba a seguir caminando, por lo que decidieron que sus restos quedaran aquí y desde entonces el obispo es patrón de la localidad.
La festividad de San Licer está registrada en Zuera ya desde principios del siglo XVI, y en la actualidad se sigue celebrando como la principal fiesta patronal del municipio.
La presentación de las fiestas tiene lugar el fin de semana anterior al 26 de agosto, y en este acto las damas del año anterior hacen entrega de su corona a las nuevas damas, que mantendrán su reinado hasta el año próximo.
El clásico chupinazo tiene lugar el mencionado 26 de agosto cada año, y marca el inicio de una semana de festejos que cuenta con actividades para la población infantil, como los correcalles o cabezudos; eventos que atraen gente de todas las edades como los festejos taurinos, las sesiones café en las que se disfruta de la actuación de diferentes artistas y orquestas de renombre, exposiciones y obras de teatro; y una extensa variedad de ocio nocturno que permiten a la juventud seguir con los festejos hasta altas horas de la madrugada con la actuación de discomóviles y DJs.
Sin duda, una semana en la que celebramos nuestra historia y la damos a conocer a todas las personas que vienen de diferentes lugares de la comunidad de Aragón.